Marketing de guerrilla: marca la diferencia con anuncios de impacto
¿Alguna vez pensaste que el marketing y la guerrilla tendrían algo en común? el marketing de guerrilla te demuestra que sí que tienen, pero no te preocupes que no venimos hacer mal a nadie, aquí tu mejor arma es el ingenio. Sigue leyendo y descubre qué es y cómo puedes aplicarlo a tu estrategia de marketing.
Lo cierto es que los que nos dedicamos al marketing sabemos que lo nuestro es una lucha constante por captar la atención de nuestros clientes. Esto no es nuevo, de hecho el término “marketing de guerrilla” se viene usando desde los años 80, cuando el escritor Jay Conrad Levinson le dió vida a este término, inspirándose en las tácticas guerrilleras; organizaciones militares (o más bien paramilitares) ajenas a las fuerzas del Estado, que luchan contra el gobierno para lograr objetivos concretos.
La realidad de hoy es un entorno sobresaturado de publicidad, donde cada vez es más difícil que una persona dedique unos segundos a mirar tu anuncio publicitario. Da la sensación de que el hecho que haya tantos canales por donde comunicarse, hace una tarea titánica poder diferenciarse. Eso sin contar el tema del presupuesto, la inversión en publicidad cada vez se mira más (aunque igual esto último ha sido siempre así).
¿Qué es el Marketing de guerrilla?
Tener pocos recursos, mucha creatividad y lograr gran impacto es el mantra del Marketing de guerrilla.
El Marketing de guerrilla es una estrategia publicitaria que se basa en el uso de técnicas publicitarias innovadoras y de relativamente poca inversión, para causar el máximo efecto posible y la máxima difusión mediática en los distintos medios.
El Marketing de guerrilla es un método menos convencional, que busca acciones que sorprendan a quien le llegue. Lo que buscamos con esto es mantenernos en la mente del consumidor. Digamos que es el padre de los vídeos virales de Instagram y TikTok, aunque en realidad con estas redes se potencia y se multiplica este tipo de publicidad.
Esta estrategia funciona para todo tipo de empresa y de cualquier tamaño, aunque es ideal para empresas pequeñas, ya que se requiere poco presupuesto pero mucho ingenuo. Resulta muy útil como campaña de “brand awareness” donde se busca dar a conocer los productos y servicios de tu empresa. Aunque incluso, es una estrategia perfecta para la fase post compra donde se busca seguir llamando la atención y fidelizar al cliente.
El éxito es tal en este tipo de campañas que incluso las empresas grandes se han hecho partícipes. Nadie se puede resistir a resultados sorprendentes y presupuesto bajo. (Si te dedicas al Marketing, sabes que sin importar la empresa, siempre estamos justos de presupuesto).
Marketing de guerrilla vs Street Marketing
No hay un consenso entre los profesionales sobre la diferencia entre el Marketing de guerrilla y el Street Marketing.
El Street Marketing es un conjunto de acciones de marketing creativas realizadas en las calles o en lugares públicos, y busca principalmente la interacción con la gente.
Para muchos, el Street Marketing es una acción más dentro de la estrategia de Marketing de guerrilla. Como véis, comparten muchos elementos en su propia definición. Si queremos detectar alguna diferencia, sería en el lugar donde ocurre el evento.
El street marketing se realiza en las calles o espacios públicos, como bien indica su nombre claramente, lo vemos en ejemplos como éstos. En cambio, el marketing de guerrilla se puede hacer desde cualquier trinchera, y nunca mejor dicho. Se puede llevar a cabo en espacios públicos, en la web, en redes sociales, o en todos los lugares a la vez.
Lo más natural es que coexistan acciones de marketing de guerrilla y de Street marketing a la vez. Yo agregaría algo más, siempre que haya street marketing, habrá marketing de guerrilla, pero no hace falta street marketing para tener una estrategia de marketing de guerrilla. ¿La estaré liando más de lo que aclaro con este enunciado?
Tipos de Marketing de guerrilla
No existe una única manera de hacer marketing de guerrilla. De hecho, existen cientos de técnicas para causar esa sorpresa e impacto en los consumidores, ya que su aplicación es omnicanal o incluso diría phydigital. Te hablaré de los más conocidos, pero seguramente la lista sea mucho más extensa.
- Ambient marketing
Consiste en llevar a cabo tu acción de marketing en un espacio público, exterior o interior, y transformándolo aplicando la marca. No se trata de plantar tu anuncio y ya está, sino de hacerlo de una forma en que la gente se detenga y voltee a mirar.
- Marketing experiencial
En esta técnica se busca una mayor interacción del público, que la persona participe de manera directa con la campaña. De esta manera, conseguimos una respuesta inmediata de nuestro público objetivo.
- Flashmobs o Performance Marketing
En esta técnica buscamos hacer una reunión que parezca espontánea de numerosas personas (actores) realizando una acción concreta. La escena suele ser una coreografía de baile.
Si no habéis visto ninguno hasta ahora, aquí os dejo uno:
4. Publicidad encubierta
Lo llamamos publicidad encubierta aunque la verdad cada vez menos tiene de eso. Se trata de mostrar tu marca en escenarios en el que en principio se podría creer que no se ha pagado por esa publicidad. Lo más habitual es en una película, donde aparece el actor principal bebiendo de una marca de refresco en concreto o usando un coche o móvil de una marca que salga en primer plano. Más recientemente, lo vemos en influencers o youtubers que realizan vídeos consumiendo una marca y hablando de los beneficios como si se tratara de algo totalmente espontáneo.
5. Marketing viral
Esto seguramente nos suene más y lo veamos más habitualmente. Consiste en crear contenidos audiovisuales tan sorprendentes y llamativos, que generen una viralidad tal, que trasciendan a distintos canales, por ejemplo, que se repostee o se reproduzca en distintos canales a la vez como TikTok, Instagram, Twitter incluso Whatsapp.
Esta técnica suele ser 100% digital, y de gran impacto. Ejemplos de esto lo vemos en los famosos #challenge que hemos visto a lo largo de los años, como el Ice Bucket Challenge (donde se echaban un cubo de agua congelada para visibilizar la enfermedad del ELA), o el Mannequin Challenge, entre muchos otros.
Cómo hacer el Plan de Marketing de guerrilla
Una vez que tienes claro que quieres aventurarte con una acción distinta, desenfadada y atrevida. Lo que queda es marcarse el mejor plan de marketing para poder medir los objetivos. Así que diseñar un plan se parece mucho a cualquier otro plan de marketing, sigue estas 5 fases y triunfa:
- Identifica tu buyer persona: posiblemente ya lo tengas claro de otras campañas. Pero en caso de que no, recrea con tu equipo (involucrando a los equipos de Producto y ventas) una representación ideal del arquetipo de cliente. Aquí debes definir, quién es esa persona, qué edad tiene, de qué contexto socioeconómico disfruta, cuáles son sus necesidades, sus gustos, y qué solución le da tu producto o servicio. Tu buyer persona determinará que tan atrevida será la campaña que plantees y también el lugar donde la llevarás a cabo.
- Define el lugar o los touch points de la comunicación: una vez identificas el buyer persona, plantéate cuáles son los puntos de contacto para la comunicación. Aquí debes preguntarte en qué canales es más probable que des con él, puede ser en una marquesina en una calle en concreto, es una estación de metro, en una red social, etc.
- Mide todo con objetivos SMART: en realidad, los objetivos SMART deberían ser transversales a toda tu estrategia de Marketing. Cuando hablamos de SMART hacemos referencia a que estos objetivos sean:
- Específicos
- Medibles
- Alcanzables
- Relevantes
- En un horizonte temporal
De esta forma, te aseguras de que tu campaña tenga éxito.
- Sé creativo, sin límites: intenta ser lo más impactante y sorpresivo posible. Recuerda que queremos viralizar, que se corra la voz e incluso se rumoree.
- Mide y monitoriza: Como cualquier otra campaña, hay que establecer métricas para corroborar que se están alcanzando esos objetivos SMART. Si es posible, elabora un Excel o un cuadro de mando donde vayas apuntando el performance de la campaña, en función de los objetivos, serán X suscripciones a tu canal, X ventas en la web, X visitas a tu blog post, etc.
Ventajas del Marketing de guerrilla
En general, la ventaja del marketing de guerrilla sobre otras estrategias o acciones de marketing es que incentiva la imaginación del equipo que lo crea, pero también del público objetivo que lo disfruta.
Veamos algunos de los beneficios cuando apostamos por este método:
- Requiere poca inversión como estrategia de posicionamiento de marca, con grandes resultados.
- Permite un alto impacto en muy poco tiempo, pero también a medio plazo.
- Invita a buscar nuevas formas innovadoras y auténticas para llamar la atención del público objetivo.
- Genera un efecto positivo en las personas, incluso en personas que a priori no se dirían que son tu target.
- Permite el boca a boca y la viralidad. Al ser acciones tan entretenidas, facilita que la gente lo comente y lo comparta, sobre todo en redes sociales.
- Lo más importante: al necesitar poco presupuesto, puedes diversificar tu estrategia de Marketing e invertir en otras acciones.
Ejemplos para inspirarte con el Marketing de guerrilla
Para terminar, te enseño un par de ejemplos más que me han parecido muy divertidos, y sobre todo creativos.
Uno de ellos es la campaña realizada por una marca de gaseosas, echadle un vistazo al vídeo que no tiene desperdicio:
Aquí otro ejemplo de cómo se puede llamar la atención desde un espacio público interior. Este ejemplo es de una marca de coches muy famosa:
Como puedes ver en esta forma de hacer marketing, la creatividad es lo más importante. Así que la clave está en atreverse, en no tener miedo y jugar con los sentidos, con los espacios, con las formas y las emociones. Se trata de buscar que la gente que está pasando por la calle, se vincule e interactúe con tu marca, así que no te preocupes demasiado en que la experiencia que le ofreces sea 100% relacionado con lo que vendes. Preocúpate más por no interrumpir sino más bien brindarle un momento especial que haga que la persona se olvide por unos segundos que está de camino al trabajo.
¡A por todas!